Se denomina proteína A2 o leche A2 a aquella que contiene beta-caseína A2 en su composición. La proteína A2 se ha asociado a una mejor digestibilidad de la leche tanto en niños como en adultos.
Entrevistado:
Jorge Martínez Pérez.
Médico Adjunto de la Sección de Gastroenterología y Nutrición del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús de Madrid.
Las proteínas de la leche se clasifican en dos tipos: las proteínas del suero y las caseínas. La leche de vaca está compuesta en un 80% por caseínas de las cuales 25-35% son de tipo β-caseína A1 o A2. La diferencia entre ambas es su digestibilidad, la cual viene influenciada por el tipo de digestión/hidrólisis que presentan a nivel digestivo que afecta de forma relevante a su digestibilidad.
El consumo de leche de vaca con un elevado contenido de proteína A1 se ha relacionado con la aparición de trastornos digestivos, como el estreñimiento, una baja tolerancia a la lactosa, así como con el aumento del riesgo de desarrollo de algunas enfermedades como la diabetes mellitus tipo 1, mientras que el consumo de leche con un contenido elevado en beta-caseína A2 se ha asociado con beneficios digestivos como la mejora en el tiempo de vaciado gástrico o del tránsito intestinal. Las diferencias entre ellas se deben a su digestibilidad, ya que ambas β-caseínas tienen un valor nutricional similar.
El interés por los beneficios que aporta el consumo de leche de vaca con un contenido elevado de beta-caseína A2 ha ido en aumento con el paso de los años. Aunque inicialmente, el desarrollo productos enriquecidos en beta-caseína A2 se limitó a la leche para la población general y los derivados lácteos, en la actualidad esta mejora se ha aplicado también al desarrollo de leches infantiles, ya que representa una mejora de su perfil proteico, una mejor digestibilidad, y una mayor cercanía con la composición de la leche materna.