Innovando en inmunidad y nuevas tendencias en nutrición infantil

Desde su fundación en el año 1943, Laboratorios Ordesa ha mantenido la misión de proporcionar productos de elevada calidad nutricional y seguros para mantener el estado de salud en las diferentes etapas de la vida de las personas y en algunos casos ayudar a prevenir enfermedades. Para ello, ha hecho de la investigación y el desarrollo uno de los pilares de su funcionamiento, centrándose en la inmunoprotección infantil. La vocación de esta empresa por el desarrollo de productos innovadores queda en evidencia en los diversos proyectos de investigación y desarrollo colaborativos que han llevado a la puesta en marcha de 17 ensayos clínicos intervencionistas en el campo de la nutrición pediátrica.

El sistema inmunológico protege de infecciones y afecciones crónicas a lo largo de la vida, sin embargo, para llegar a cumplir esta función de forma óptima necesita madurar a lo largo del tiempo. Múltiples estímulos influyen en su desarrollo, siendo la alimentación un factor esencial para su correcta evolución. La leche materna es considerada como el patrón de referencia en nutrición infantil porque contiene macro y micronutrientes que influyen en la inmunoprotección. Se ha observado que, en bebés amamantados, disminuye el número de infecciones y de problemas digestivos. Así, la inmunidad y la nutrición son dos conceptos interrelacionados; hay que prestar especial atención a la alimentación ya que es fundamental para que los niños tengan un sistema inmunitario bien desarrollado.

Los trastornos gastrointestinales funcionales son síntomas recurrentes relacionados con la edad y representan anomalías de la interacción intestino – microbiota – cerebro. Su prevalencia suele ser alta en lactantes, entre el 27,1% al 38%, siendo un motivo habitual de consulta pediátrica. En niños alimentados con leches infantiles la frecuencia de estos síntomas aumenta, lo que evidencia una relación de la aparición de estos trastornos con la nutrición. Actualmente, para dar solución o por lo menos atenuar los síntomas de estos trastornos, desde la práctica pediátrica se recomienda priorizar la leche materna siempre que sea posible, la reducción de la lactosa, el uso de espesantes, la alfa-lactoalbúmina, los pre y probióticos y los nucleótidos en la alimentación habitual del niño.

Las alergias son trastornos multisistémicos que en el caso de la alergia a las proteínas de leche de vaca (APLV) mediada por IgE suele presentar síntomas clínicos cutáneos, gastrointestinales, respiratorios y sistémicos. La APLV es una patología prominente a nivel mundial y es considerada como la alergia, tanto alimentaria como no alimentaria, más frecuente en la infancia, con una prevalencia del 5% sobre todo en niños menores de 1 año. En lactantes que padecen de APLV se requiere el uso de fórmulas hipoalergénicas como base de su alimentación (fórmulas extensamente hidrolizadas, fórmulas vegetales como es el caso de las elaboradas a base de proteínas hidrolizadas de arroz, o fórmulas basadas en aminoácidos libres). En el presente vídeo se presentan los resultados preliminares del estudio GRITO, el cual se llevó a cabo para establecer los beneficios de las fórmulas a base de proteínas hidrolizadas de arroz en el manejo nutricional de la APLV.

La obesidad es una pandemia mundial que afecta a personas de todas las edades y grupos sociales en todos los países del mundo. Este trastorno nutricional se asocia a múltiples comorbilidades que afectan a todos los órganos y aparatos y dentro de sus principales causas están la nutrición y el estilo de vida. En el caso de la población pediátrica es la patología nutricional más prevalente. La leche materna es clave para la nutrición infantil y en varios estudios se ha observado que un mayor tiempo de lactancia disminuye el riesgo de obesidad, diabetes tipo II, infecciones y mejora el desarrollo cognitivo. Por ello, se debe promocionar el desarrollo de leches infantiles que se parezcan lo más posible a la leche materna en su composición para así mejorar la inmunidad del niño y modular el desarrollo de su microbiota intestinal.

La desnutrición infantil es un problema de salud pública que aún es frecuente en los países en vías de desarrollo. Sus principales manifestaciones se observan en el peso o la talla del niño, pero también puede tener consecuencias en los sistemas digestivo, cardiaco, inmunológico, respiratorio y en el sistema nervioso central. La principal causa de este problema es la disminución en la ingesta alimenticia, aunque también hay enfermedades que condicionan este proceso. El diagnóstico temprano es esencial para aumentar la efectividad del tratamiento y poder así revertir los efectos de la desnutrición en los niños afectados por ella.

El desarrollo cognitivo durante los primeros años de vida es especialmente importante porque varios de los periodos sensibles en el desarrollo cerebral se dan durante este tiempo. La nutrición temprana, que es la que se da durante los primeros 1000 días de vida, es uno de los factores centrales en este proceso, siendo otros la salud de la madre, factores ambientales o el estilo de vida. Diversos estudios han resaltado el papel de la leche materna como patrón de referencia en la nutrición infantil. El estudio COGNIS, del cual se presentan los resultados preliminares, demostró que la inclusión de los compuestos bioactivos presentes en la leche materna en las leches infantiles mejora el desarrollo visual, cognitivo y del lenguaje y reduce los problemas conductuales en los niños.